HELLENA TAYLOR
Debido al revuelo formado en Twitter, el propio Hideki Kamiya ha salido a la palestra para hablar al respecto.
Las últimas horas han sido de lo más movidas en Twitter. Cuando apenas faltan unos pocos días para el lanzamiento de ‘Bayonetta 3’, uno de los juegos más esperados del catálogo de Switch, la que fuera la voz original del personaje ha destapado en la red social el motivo de su ausencia en el videojuego.
Desde su cuenta personal en Twitter, Hellena Taylor ha denunciado las malas condiciones laborales de Nintendo y Platinum Games. La actriz de doblaje destacó que sólo le ofrecieron 4.000 dólares por la tercera entrega; una oferta que desechó al instante al sentirse menospreciada. Una situación que la propia Hellena explicó a lo largo de varios vídeos que no tardaron en hacerse virales y en los que también señala que, debido al estrés y temor de quedarse sin trabajo, le provocaron ansiedad, depresión e incluso pensamientos suicidas.
“Estoy pidiendo a los fans que boicoteen el juego y en su lugar den el dinero que se hubiesen gastado a la caridad. Sólo pedía un salario digno y decente. Lo que hicieron fue legal, pero inmoral. Si eres alguien que se preocupa por la gente, entonces te insto a que boicotees el juego”; destaca la actriz en el vídeo, asegurando que no le preocupa lo más mínimo un acuerdo de confidencialidad o las represalias de las compañías. “No puedo ni permitirme un coche. ¿qué van a hacer, quitarme la ropa? Que tengan suerte”.
Hideki Kamiya, CEO de Platinum Games y uno de los creativos japoneses más respetados, no ha dudado en salir a la palestra para hablar del tema. El nipón, quien no suele prodigarse demasiado en redes sociales, ha sido muy tajante al respecto con las palabras de Taylor: “Triste y deplorable la actitud de falsedad. Eso es todo lo que puedo decir ahora. Por cierto, cuidado con MIS REGLAS”; concluía a modo de amenaza. La propia Platinum Games señaló hace tiempo que el motivo de haber escogido a Jennifer Hale (voz de Shepard en Mass Effect) en lugar de Taylor se debió a una agenda demasiado apretada de ésta última; algo que la actriz ha negado.