DIVERSIÓN SIMPLE Y ECONÓMICA
A día de hoy, si entramos en una tienda de videojuegos y nos fijamos en todos los productos que se van lanzando junto a sus precios, a más de uno le podría "dar un yuyu". Lo mismo ocurre incluso si vamos a las tiendas virtuales de videojuegos.
Juegos a 60-70€, pases de temporada, ediciones coleccionista, dispositivos adicionales, nuevas revisiones de consolas... Con sólo comprar una consola más juego podemos gastarnos cerca de 500€, ahí es nada. Viendo este panorama, no es de extrañar que incluso una consola con juegos publicados hace 30 años, llame la atención cuando sólo cuesta 60€.
Sí, lo que unos se gastan para comprar un incompleto videojuego, otros lo aprovechan para comprar 30 juegos y una consola con mando. Como en los años 80, el resto de empresas son incapaces de competir con Nintendo, y eso que los japoneses no necesitaron de mucho esfuerzo para lanzar NES Classic Mini.
Diversión directa, sencilla, barata y completa. Las claves del éxito que está teniendo NES Classic Mini se deben principalmente a esto, pero hay mucho más. La clave que no se ve a simple vista es el concepto de videojuego que tienen los nipones, la cual difiere enormemente de otras compañías.
Echando cálculos, 30 videojuegos a 60€ equivale a 2€ videojuego; y no estamos contando el precio en sí de la consola, pues para Nintendo, videoconsola y videojuegos siempre han estado directamente conectados. Ahora bien, si Nintendo vendiese Punch Out!!! o Ice Climber en Nintendo eShop a 2€... ¿cuántos lo comprarían? Probablemente no muchos, ¿por qué compran NES Classic Mini entonces?
60€, 30 videojuegos; este es el mensaje principal, pero Nintendo se ha ganado el apoyo de los fans también con su política. Los juegos de Wii U y 3DS de lanzamiento pueden costarnos entre 35€ y 45€ de media, mientras que los lanzamientos de PlayStation 4 y Xbox One llegan por 60€ normalmente.
Pero luego pasa un año, y los juegos de PS4 y One pasan a valer 30€ mientras que los de Nintendo se mantienen en su precio. Pasa otro año, y sigue bajando el precio en PS4 y One, mientras que en Nintendo con mucha suerte, puede entrar al catálogo de Selects y pasar a costar entre 20€ y 25€ el juego. Pasados 5-6 años, los juegos de Nintendo se mantienen o en el precio de salida, o en el de los Selects, sin embargo, los de consolas de PlayStation y Xbox ya pueden encontrarse por 5€ o 10€ incluso. Y no hablemos de casos drásticos que pasan a ser gratuitos o pasan de 60€ a 10€ en menos de un año...
Es ahí cuando se tiene convencida a la comunidad nintendera. No es algo que se haya conseguido ayer, es el fruto de muchos años manteniendo una implacable política de precios y una forma de ver a los videojuegos en sí, que si bien no gustan a los más consumidores, acaban cuajando muy bien en los jugadores con su corazoncito nintendero.
Por supuesto, muchos querrán volver a los 80 con NES Classic Mini, y la nostalgia será un factor importante en la decisión de compra, pero si NES Classic Mini está siendo un éxito, también es porque Nintendo ha sabido ver y aprovechar una oportunidad que solamente ella misma podía dar a sus jugadores. Que comience la diversión.