INESPERADOS
Spec Ops: The Line
El título de acción a cargo de Yager podríamos decir que se encuentra entre lo mejor de la generación pasada en el campo de los shooters. A pesar de que sus mecánicas son sencillas, la trama es adulta y profunda como pocas. Nos hace reflexionar y las decisiones que tenemos que tomar para nada son sencillas. Su final, a la altura, y con un cliffhanger que se nos quedará grabado durante años.
Dead Space
Dead Space es una de las mejores aventuras que podemos disfrutar a día de hoy en consolas y PC. Visceral Games recuperó la esencia del Survival Horror, trasladando la experiencia al género de la ciencia ficción. Nos poníamos en la piel de un ingeniero llamado Isaac Clarke que debía reparar la nave USG Ishimura, y de paso, buscar a su mujer. ¿Qué le ocurrió a ésta?
Bioshock
Muchos de los títulos aquí aparecidos son clásicos, Bioshock no iba a quedarse atrás. Con un jugabilidad que bebe de los shooters de la vieja escuela, la obra de Ken Levine nos traslada a la utopía submarina llamada Rapture y la guerra iniciada por un tal Atlas y Andrew Ryan, fundador de la ciudad. ¿Quién es tan misterioso hombre? Cuando lo sepas, alucinarás.
Final Fantasy VII
Es uno de esos juegos que suelen estar muy presentes cada vez que mencionamos grandes experiencias o clásicos instantáneos; pero no es para menos. Final Fantasy VII reúne todos los indicativos de ser todo un ejemplo a seguir en el género de los JRPG, al menos en su época. Además de una jugabilidad y apartados gráficos renovados en su momento, la épica historia de Square Enix tenía un giro de guión tan inesperado como dramático.
Metal Gear Solid V: The Phantom Pain
Estamos posiblemente al que sea el mayor cliffhanger que hemos visto en la historia de los videojuegos. Una historia que se forja a partir de Metal Gear Solid 3, continúa con Peace Walker, tiene su prólogo con Ground Zeroes y concluye de forma totalmente inesperada con The Phantom Pain. Os garantizamos que el final del último juego de Kojima en la saga Metal Gear Solid tiene un final tan sorprendente que os faltarán días para asimilarlo.