TODOS LOS PASOS
Te contamos todo lo necesario para que puedas recuperar energía en ‘Elden Ring’ mientras eliminas enemigos del mapa.
Si algo nos ha dejado claro ‘Elden Ring’ es que quiere ser uno de esos títulos de From Software que invite a todos los jugadores a ponerse a prueba de la mejor forma posible. Por ello, la obra se adapta a todos los estilos de juego, buscando que cada jugador pueda adaptar la experiencia a lo que realmente necesite. Esto no solo tiene relación con el momento de conseguir a la montura, sino incluso con la forma en la que derrotamos a los enemigos.
Pero es posible que uno de los problemas con el que todos los jugadores se encuentran se relacione con el daño recibido durante la batalla. Este es un problema bastante común entre los jugadores y que, normalmente, se suele solucionar con utilizar los frascos para curarse. Sin embargo, hay una forma de poder curarse mientras se ataca a los enemigos y vamos a contarte cómo puedes conseguirlo.
El método para curarse en Elden Ring mientras se ataca a los enemigos
Debes saber que para poder realizar la curación necesitarás realizar ataques críticos a los enemigos. Un ataque que puedes realizar a base de atacarles por la espalda o incluso con un contraataque. Sin embargo, esta función no está desbloqueada desde el principio, sino que tendrás que conseguir antes la Daga carmesí de asesino, un objeto de tipo Talismán que guarda como efecto esa curiosa ventaja.
Para poder conseguir esta es realmente sencillo. Lo único que vas a necesitar es ir a las Catacumbas de la Muerte, situadas en el Necrolimbo oeste. Una vez allí tendrás que llegar hasta el final y eliminar al jefe. Este enemigo dejará caer la Daga carmesí de asesino, la cual debes equipar.
Una vez tengas esta equipada, todo resultará mucho más sencillo. A partir de este punto simplemente tendrás todas las opciones para poder atacar a tus enemigos y conseguir que estos caigan a tus pies. Una herramienta realmente útil, sobre todo para garantizar que no vayamos a caer en la batalla constantemente o que nos quedemos sin frascos curativos cuando más los necesitemos.