¿EL INVENTO DEL SIGLO?
Por todos es sabido que los japoneses están a la última en lo que a inventos se refiere, en especial los que tienen que ver con la más actual de las tecnologías. En este caso no se trata de una avanzada IA o un tren bala de última generación, sino de una silla.
No hablamos de una silla cualquiera, sino de una en la que leer, disfrutar de los videojuegos y otras muchas tareas nunca había sido tan cómodo. Las llamadas sillas-gamer están de moda entre los conocidos streamers y jugadores, pero ésta en concreto va un poco más allá permitiéndonos estar en el suelo en la postura correcta sin que nuestra espalda sufra al mismo tiempo que extremadamente cómodos.
Buddy, nombre que recibe este invento japonés, está disponible al precio de algo más de 40 dólares y su anuncio ha provocado que se agoten las existencias en cuestión de horas. No es para menos si atendemos a sus características y materiales. Podremos reposar la espalda para ver la televisión o jugar a la consola en ella sin riesgo alguno; apoyar nuestro brazo, tumbarnos y un largo etcétera que hacen de Buddy una atractiva propuesta para los que quieran añadir un complemento más a su salón o habitación.
Disponible en varios modelos - rosa y verde - su comercialización está prevista para abril de este mismo año. Desde la compañía ya han adelantado que están sorprendidos ante la grandísima acogida de la misma, por lo que esperan tener más unidades en producción durante las próximas semanas. ¿Os haríais con una de estas sillas Buddy?
Adiós al lag en los videojuegos
Uno de los fallos técnicos que más molestan a los jugadores de videojuegos es el siempre maldecido lag, un problema con la conexión al servidor que provoca que nuestra partida online se ralentice y pueda ocasionarnos problemas a pesar de nuestro nivel de juego. En ocasiones, una buena partida puede echarse a perder por culpa del lag, pero eso podría pasar a la historia gracias a una tecnología de lo más curiosa en la que está trabajando Microsoft.
Se trata de Projekt Natick, una creación del ingeniero Sean James que presentó este proyecto en 2013, y que ahora está cogiendo cuerpo de verdad. Se trata de un servidor de tamaño bastante grande, aunque menor a otros, que estaría situado dentro de una cápsula metálica sellada. Esa cápsula se enviaría al fondo marino y se establecería una unión a la costa mediante diferentes tipos de conexiones para que los usuarios puedan utilizarlo. Actualmente, Microsoft ya está realizando pruebas.
El motivo de situar este servidor bajo el mar es que las corrientes marinas ayudan a la tarea y la temperatura más o menos constante del fondo sirve como refrigerante. Además, desde Microsoft advierten que este aparato está hecho totalmente con materiales ecológicos para no dañar el ecosistema. A través de la página oficial de Projekt Natick, Microsoft ofrece toda la información y los avances de una investigación que podría cambiar muchos aspectos de internet, incluyendo el uso de videojuegos.