LA MASCOTA QUE MARCÓ UNA GENERACIÓN
En la década de los 90 hubo varios juguetes que marcaron una generación de niños y no tan niños. El Furby, la Game Boy, el cocodrilo sacamuelas... pero ninguno ha sido tan recordado como el Tamagotchi. Un surtido de mascotas virtuales a la que debíamos dedicar nuestra atención. Comida, caricias, jugar con ella, lavarla... eran algunas de las demandas de los personajillos virtuales, que nos tenían en constante alerta. Esto se traducía en semanas de diversión para los más peques de la casa en los 90. Ahora que ya no lo somos tanto, extrañamos este tipo de diversión.
El juguete fue lanzado por Bandai el 23 de noviembre de 1996 en Japón, y llegaría en mayo de 1997 al resto del mundo, convirtiéndose rápidamente en una de las modas de juguetes más grandes de la década y de la historia. Y es que era raro el niño que no tenía una de estas mascotas colgadas del cuello. Algunos, con suerte, han tenido varias de estas criaturas; sobre todo si el pequeño dispositivo se nos olvidaba en el bolsillo del pantalón y este terminaba dándose un baño en la lavadora.
Al encender el juguete aparece un huevo en pantalla. Después de ajustar el reloj, el huevo se moverá hasta que se abra. A medida que la tecnología fue avanzando, el tamagotchi solicitaba otros datos, como el cumpleaños del jugador y su nombre. El jugador puede cuidar a la mascota tanto o tan poco como lo desee, y el resultado depende de las acciones del jugador. Las mascotas tienen varios medidores, entre los que se encuentran el hambre o la felicidad, para determinar qué tan sana y bien cuidada está.
La mascota pasa por varias etapas distintas de desarrollo a lo largo de su ciclo de vida. Cada etapa dura una cantidad de tiempo determinada, según el modelo del juguete, y cuando alcanza una nueva etapa, la apariencia de la mascota cambia. La mascota puede "morir" debido a la falta de cuidado, la vejez, la enfermedad y, en algunas versiones, a los depredadores. Un cuidado deficiente puede hacer que una mascota muera, pero también puede morir de viejo. En modelos más avanzados, mediante la comunicación por infrarrojos, dos jugadores podían vincular sus juguetes.
Aunque actualmente no es difícil encontrar las nuevas versiones de Tamagotchi, lo cierto es que gracias a los móviles podemos experimentar sensaciones parecidas a las originales. Algunas aplicaciones o juegos de mascotas virtuales más famosos son Pou, Little Pet Shop, Dragon Pet, Furdiburb, o los propios Tamagotchi, entre otras. Dichas apps conservan la esencia del juego original, además amplían las posibilidades jugables acorde a los tiempos que corren; pero nunca podrán compararse a las sensaciones de la original.
Tamagotchi marcó una época, y ha dejado decenas de curiosidades. Estas son algunas de ellas: