¿SERÍAS CAPAZ DE ENCONTRARLAS?
El coleccionismo bien podría pasar por profesión. Hay quien emplea cientos de horas y dinero en hacerse con todo tipo de objetos pertenecientes a otra época. Libros, cuadros, discos y un largo compendio que podría abarcar una ingente cantidad de categorías. La referente al coleccionismo friki no iba a ser menos, siendo una de las más comunes en los tiempos que corren.
Este es el caso de un usuario que ha debido de alterar ligeramente la forma en la que colecciona figuras de sus personajes favoritos, ya sean de videojuegos o basadas en populares juegos de mesa como Warhammer. Su pareja no lleva muy bien aquello de recibir un paquete a casa a nombre de su novio y que éste contenga decenas de cajas de figuras, por lo que han tenido que hablar del tema.
Tras plantearle la mujer la situación y pedirle que dejara de comprar figuras, en especial porque el sótano con el que cuenta su pareja ya bien podría pasar por una tienda de juegos de mesa y rol, parece que ella no leyó la “letra pequeña del acuerdo” al que llegaron.
El usuario ni corto ni perezoso siguió adquiriendo todo tipo de figuras, pero esta vez no poniéndolas a la vista de su mujer, sino más bien todo lo contrario, escondiéndolas. Y por ello no nos referimos a situarlas detrás del frigorífico o en lo más alto del armario; sino algo mucho más ingenioso.
Tal y como podéis ver en las imágenes, figuras de Warhammer aparecen repartidas por distintas zonas de la casa, pero para percatarse de su presencia hay que fijarse muy bien. Un grupo de soldados de camuflaje está perfectamente escondido entre un grupo de plantas en su correspondiente maceta.
Otras por el contrario, esta vez de color rojo, son ideales para ser colocadas entre un grupo de frutas decorativas en plena cocina. Y es que, ¿quién iba a caer en la presencia de dichas figuras con semejante atino para colocarlas? Desde luego a la pareja de este ingenioso amante de las figuras de videojuegos y ciencia ficción, parece que no.
Tal y como mencionábamos líneas atrás, el sótano se convierte por méritos propios en un auténtico paraíso para los jugones. Cuenta con todo lo necesario para pasar largas horas - o todo el fin de semana - en él. Desde un arcade, varias consolas, una enorme mesa decorada con motivos de Warhammer para echarse una partida al popular juego de batallas y una gran colección de juegos de mesa. ¿Se puede pedir más?
Los coleccionistas en videojuegos no siempre es un grupo de usuarios que está vinculado a la compra compulsiva de todas aquellas ediciones especiales que se presentan. Muchas veces un juego difícil de encontrar, o ampliar el catálogo de juegos de nuestra consola favorita es también sinónimo de coleccionismo
Por supuesto, no deja de ser un hobbie caro. Hay títulos, por ejemplo para SNES, que han llegado a alcanzar la friolera de miles de euros; por no hablar de aquellas ediciones que realmente limitadas a apenas unas decenas de unidades no han llegado a nuestro país. Si quieres expandir tus conocimientos sobre el coleccionismo, adentrarte en este apasionante - y prohibitivo - universo, o emplear con sabiduría tu dinero; no dudes en echar un vistazo al vídeo que hicimos al respecto.