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HIKIKOMORI

Una madre culpa a Pokémon de la enfermedad mental de su hijo de 38 años

Esta enfermedad es muy frecuente entre los jóvenes japoneses y, en los casos más graves, estas personas no abandonan sus hogares en décadas.

Batalla Pokémon Game Freak

Tal vez el término hikikomori te es desconocido. Seguramente, si eres fan de la cultura japonesa sabrás de qué se trata esta enfermedad, sin embargo, sigue siendo muy desconocida para la mayoría de personas. Hikikomori es un término japonés que se utiliza para describir un fenómeno social, en el que una persona decide abandonar la vida social. Esta persona suele aislarse del mundo, y se confina en su hogar. El término se refiere tanto al fenómeno social, como a las personas que pertenecen a este grupo social.

Esta fenómeno social o enfermedad es muy frecuente entre los jóvenes japoneses y, en los casos más graves, estas personas no abandonan sus hogares en décadas. Recientemente ha salido a la luz un caso de una madre cuyo hijo de 38 años sufre de Hikikomori, y ha querido compartir su experiencia en la red de redes. Según su madre, cada vez que alguien menciona trabajar o conocer a alguien del sexo opuesto, este se encierra en su habitación.

Pokémon en Game Boy | The Pokémon Company

Además de culparse a sí misma y al sistema educativo por el trastorno social de su hijo, esta madre también apuntó a Pokémon como una de las causas de la enfermedad de su hijo. Pokémon es una de las franquicias más conocidas del mundo de los videojuegos y de la animación -conocida como Pocket Monsters en algunos lugares del mundo-. Nació como un par de videojuegos para la Game Boy original que fueron desarrollados por Game Freak y publicados por Nintendo. Pocas franquicias del mundo del manga, anime y videojuegos gozan de una fama y salud similar a la de Pokémon.

Esta madre cuenta que, en lugar de buscar trabajo, su hijo le dijo que quería jugar a Pokémon para siempre. Y es que desde que esta madre compró dicho juego a su hijo, todo ha ido cuesta abajo. Su hijo fue despedido de su trabajo temporal, dejó la universidad y se convirtió en un hikikomori. Desafortunadamente, no hay una solución fácil para este problema y, aunque es fácil echarle la culpa a los videojuegos, nada tienen que ver estos con el fenómeno social del hikikomori.