POKÉMON GO
Pokémon GO, la aplicación para móviles de Niantic, goza de una gran popularidad. Puede decirse que vive una segunda época dorada. Con un amplio contenido y una dinámica de juego de lo más sorprendente, los jugadores disfrutan de la oportunidad de sentirse como auténticos entrenadores. Y es que el juego, que ya lleva entre nosotros más de dos años, nos ofrece la posibilidad de capturar a las famosas criaturas en el mundo real utilizando la realidad aumentada.
Aunque llegó hace casi 2 años, sigue siendo muy jugado a día de hoy. Este repunte de jugadores que vuelven a instalárselo, y de jugadores totalmente nuevos, es debido en parte a que es compatible con los dos nuevos juegos de la franquicia para Nintendo Switch, Pokémon Let's Go: Pikachu! y Pokémon Let's Go: Eevee! Además, el juego actualmente tiene poco que ver con el que se lanzó hace años, pues se han implementado más generaciones de Pokémon y formas de juego.
Uno de los elementos más habituales de juego son los Gimnasios y las Poképarada. En estos lugares los jugadores pueden conseguir Poké Balls, Pociones, Huevos y otros objetos útiles en el juego. Estas, por lo general, se encuentran ubicadas cerca de obras de arte públicas, arquitectura única o lugares públicos de reunión (centros comerciales, grandes almacenes...). Sin embargo, una Poképarada muy particular está haciendo que la Diputación de Valencia y Niantic se enfrenten entre sí.
Como informa el medio LasProvincias, la Poképarada en cuestión está situada en el castillo de Corbera. El arquitecto de la institución provincial, José Simó, se puso en contacto con Niantic para exigir la eliminación del gimnasio del conocido juego. En su primer contacto, José Simó advertía a la empresa norteamericana que el castillo es un bien patrimonial de la Diputación, que estaba en ruinas y que se encontraba en fase de restauración. De hecho, según Simó, la gran afluencia de gente ponía en riesgo las tareas de recuperación de la fortaleza.
Niantic, que se toma muy en serio su trabajo con las Poképaradas, exigió al arquitecto que se identificará mejor para poder llevar la petición a algún lado. Niantic comentó que no podía certificar que el castillo estuviera en un proceso de restauración, por lo que pidió a la Diputación un artículo oficial y una foto para poder comprobar que lo que decían era cierto. José Simó elevó el tono de la conversación, e hizo saber a Niantic que estaban tratando con una administración pública, y que el gimnasio virtual de los Pokémon "se sitúa en un propiedad privada de la Diputación de Valencia". Además, advirtió a la compañía con medidas administrativas y judiciales si no eliminaban esa Poképarada.
Por parte de Niantic, se volvió a reiterar la petición de un artículo que confirmara las tareas de rehabilitación para poder eliminar la Poképarada, y aseguraron que "alientan a sus usuarios a estar seguros y alerta, a seguir las leyes locales y a respetar los lugares que visitan. Los jugadores deben ser tratados como todos los visitantes".