VER PARA CREER
Fortnite es el juego que posiblemente todo el mundo ha escuchado hablar en los últimos meses. En los colegios han tratado de prohibirlo, llegando incluso los propios desarrolladores a emitir avisos en la versión móvil de Fortnite para tratar de alertar a los alumnos. En las últimas horas el título de Epic Games ha vuelto a ser protagonista pero esta vez de una manera que no imagináis.
Tal y como reporta el medio WXII 12 de Greensboro, Carolina del Norte (EEUU) y cuyas palabras han sido recogidas por Kotaku, un tornado asoló la varias de las zonas de la ciudad dejando un rastro de destrucción a su paso: vehículos volcados, árboles arrancados de sus raíces, casas destruidas y un largo etcétera. Hasta aquí nada fuera de lo normal si tenemos en cuenta la asiduidad de este tipo de fenómenos en Estados Unidos. La cereza al pastel en la historia la pone un joven, Anton Williams.
Ni corto ni perezoso, este chico americano prefirió continuar jugando a Fortnite Battle Royale hasta concluir la partida antes que poner a salvo su vida. “Me encontraba en casa tranquilo jugando a Fortnite y comencé a escuchar ruidos muy extraños que provenían del exterior”; declaraba Anton a la TV local.
“Cuando me asomé por la ventana pude ver como los tejados de las casas de mis vecinos salían disparados. Me volví a sentar, quería terminar la partida, sólo quedaban un par de jugadores”; añadía. No fue hasta que el tornado provocó la interrupción de la línea eléctrica cuando Anton pasó a preocuparse de verdad por la situación.
El joven cogió a hermana y sobrino y se refugió en el baño con ellos. “¿Qué pensabas en ese momento?”. Anton, ni corto ni perezoso declaró: “Sinceramente, estaba pensando en el videojuego”; concluyó.