SORPRENDENTE
El mundo de las proposiciones de matrimonio merece ser atendido con detenimiento. A día de hoy y en pleno de 2016 circulan por la red todo tipo de pedidas que van desde espectaculares bailes, rodajes de películas o en pleno salto en paracaídas. La que os mostramos hoy a buen seguro sorprenderá a más de uno, en especial por el tiempo invertido, el resultado obtenido y por supuesto la respuesta de la novia.
La historia tiene por protagonistas a Robert Fink y Angel White. El primero es desarrollador de videojuegos, mientras que su pareja ha hecho las veces de betatester en algunas ocasiones con ciertos proyectos en los que ha trabajado Robert.
Hasta aquí nada fuera de lo normal, salvo cuando el bueno de Robert estuvo durante 5 meses, y con alguna que otra excusa de por medio al llegar tarde a casa, en un videojuego creado por él mismo y que utilizaría a modo de pedida de mano.
Terminado el desarrollo, Robert le ofreció a su novia hacer de nuevo de beta-tester. Para darle algo más de credibilidad a dicha fase, los compañeros de Fink hicieron rellenar a Angel un formulario propio de este tipo de testeos. A partir de aquí, y con el mando en la mano, sólo hay que ver la reacción de la chica ante los constantes guiños que Robert introdujo en el videojuego.
¿Has conseguido contener las lágrimas?
Una original forma de pedir matrimonio
La historia de Robert Fink y Angel White no ha sido la única. Joey, un joven diseñador 3D, ha confeccionado por él mismo el videojuego Joey and Owen Save the World para que lo jugase y disfrutase su novia espcialmente. Joey no quiso escatimar en detalles a la hora de confeccionar la que es sin lugar a dudas, una de las pedidas de mano más creativas en el sector de los videojuegos. Detalles como el hecho de grabar propiamente tanto la partida de la joven, como capturar en vídeo la pantalla del videojuego durante todo el juego.
Pero obviamente la guinda del pastel ha sido la respuesta de la joven Owen, quien ha aceptado casarse con Joey, tras un final de videojuego de película. Sin duda, una historia de amor que probablemente inspire a más de uno a la hora de pedirle la mano a su pareja; aunque no todos tendrán las mismas habilidades que Joey a la hora de desarrollar un videojuego. Os dejamos a continuación con el vídeo de toda esta anécdota.