LIMPIA TUS BLU-RAY
Por el momento los juegos siguen llegando en formato físico, y por el momento seguirá siendo así durante varios años, aunque algunos analistas ya predicen un futuro completamente digital para la industria en menos de 10 años. Es importante, por lo tanto, que sepamos cuidar nuestros juegos y que su mantenimiento les permita durar muchos años. Por supuesto, los cartuchos y los discos se cuidan de forma muy diferente. En esta ocasión dejaremos los cartuchos a un lado y nos centraremos en los blu-ray, formato adoptado por PS4 y Xbox One para sus juegos.
Cuando hablamos de un blu-ray, hay que saber que lo hacemos de un formato de disco óptico, al igual que en su momento lo eran los DVD, sin embargo, estos permiten mucha más información sobre el disco del mismo tamaño. Por lo tanto, existe un láser que le la información almacenada en el disco y, aunque la superficie del blu-ray es más resistente que los viejos DVD, esta debe de estar en óptimas condiciones para que no existan problemas de lectura. Por supuesto mantenerla limpia y procurar no tener marcas de importancia.
Muchos de los problemas de los juegos de PlayStation 4 o Xbox One, cuando no ofrecen una buena lectura, vienen de problemas derivados con su limpieza. Desconocemos cómo y con qué debemos limpiar los discos, y terminamos empeorando su condición. En lugar de limpiar manchamos más la superficie del blu-ray y, en casos extremos, incluso podemos dañarlo seriamente. En otras ocasiones nos compramos juegos de segunda mano en diferentes tiendas y el disco ya viene sucio y un poco perjudicado... querrás tenerlo como si fuera nuevo, pero no sabes cómo hacerlo sin estropearlo. Aquí te ofrecemos algunos consejos.
Lo primero es conocer la técnica. Siempre debe hacerse sobre una mesa, una superficie plana, dura, resistente y limpia. Nunca limpies los blu-ray (y otros discos) sujetándolos con la mano. Si sujetamos el disco con el dedo índice por el agujero y el dedo pulgar por el borde, primero que existe una leve parte de contacto que no nos interesa durante la limpieza, y segundo el disco puede doblarse al hacer algo de presión con un paño. Por tanto, disco sobre una mesa limpia, con la parte grabada hacia arriba.
Ahora con un paño de un tejido de fibra muy suave, microfibra o la gamuza para gafas (obviamente limpia y sin años de uso), lo vamos pasando suavemente por la superficie. Asegúrate de que no exista arena o cualquier otro residuo sólido en el disco y en la gamuza. Sin mojarlo, con el tejido completamente seco, vas dando pasados de la zona interior del blu-ray hacia afuera. Como si estuvieras arrastrando la suciedad hacia el borde del disco. Nunca lo hagas en círculos, ya que lo único que provocas es arrastrar la suciedad por la superficie.
Si el disco que has comprado de segunda mano está muy sucio, o se te ha caído algo sobre el blu-ray y no soluciones la papeleta con una simple gamuza seca, podemos intentar limpiar el disco con un limpiador. Nuevamente decimos que los blu-ray son más resistentes que los DVD, pero ni mucho menos es uno de los Transformers irrompibles... ¿Qué podemos hacer? Un trapo muy suave húmedo con algún limpiador. Húmedo es húmedo, nada de sumergir el trapo en líquido limpiador. Y, sobre todo, nada de aplicar el líquido en la superficie del blu-ray. Primero al trapo y luego pasar el trapo por la superficie del blu-ray.
¿Qué podemos usar? Necesitamos limpiadores que no sean demasiado corrosivos. Humedecer el paño con agua quizás sea suficiente. Muchos limpian los blu-ray con algodón humedecido en etanol (alcohol etílico). Este es un poco corrosivo, así que lo que podéis hacer si preferís esta técnica, es rebajar el alcohol con un poco de agua. 50% agua y 50% alcohol, una solución bastante utilizada para limpiar productos informáticos, conectores de audio, etc.
Si queréis limpiar con otro producto que tengáis por casa, aseguraos que dicho limpiador no contenga ningún tipo de grasa. Existen unos limpiadores específicos para pantallas sin grasa que funcionan bastante bien para la superficie de los blu-ray. También se venden limpiadores específicos para discos, aunque muchos son bastante corrosivos y, tras unos años limpiando los blu-ray con ellos, muchos terminan por estropearse.