LO QUE NOS ESPERA EN 2019
2019 puede ser un año, en cuanto a consolas de nueva generación se refiere, fantástico. Y es que dos de las tres grandes compañías del sector que reinan en la fabricación de videoconsolas pueden presentar sus nuevas plataformas. Estamos hablando, como podéis adivinar, de Sony y Microsoft. Según todos los rumores, y más después del anuncio de que Sony no asistirá al E3, dicen que las dos compañías presentarían una nueva generación, PlayStation 5 en el caso de Sony, y Xbox Scarlett en el caso de Miscrosft.
Pero la tercera gran compañía fabricante de consolas, Nintendo, no se quedaría atrás. Según los rumores, esta no presentaría una nueva consola, ya que Switch cuenta con muy pocos años de vida. Sin embargo, realizaría un rediseño (Nintendo Switch Pro) de la misma con nuevas características técnicas que, si bien no alcanzarían a PlayStation 5 y Xbox Scarlett, sí sería suficiente para reescalar juegos a 4K. A continuación repasamos las consolas o revisiones que se presentarían en 2019.
PlayStation 5 se muestra como una monstruosidad técnica, al menos según los rumores. Sería capaz de soportar los 4K y 60fps estables y, como ya se rumoreó en el pasado, esta contaría con un CPU Ryzen de 8 núcleos. También contaría, por separado, con una nueva versión de PlayStation VR con cámara incorporada y guantes de realidad virtual. También se ha hablado mucho del DualShock 5, debido a algunas patentes que Sony registró en los últimos meses. Básicamente sería como un DualShock 4 con una pantalla táctil en el medio. Algo así cómo si sustituyéramos el panel táctil del mando por una pantalla táctil.
Los rumores aseguran que Xbox Scarlett tendrá dos modelos. El primer modelos sería tradicional, como ya adelantó Phil Spencer en la pasada conferencia del E3. Una consola muy potente con un precio de lanzamiento estándar en una nueva generación, quizás 400 o 500 euros. La otra versión será una consola significativamente más barata, y también con menos prestaciones técnicas, pero centrada completamente en la nube. Es decir, sería una consola en la que los juegos se reproducen en un servidor, y la máquina sólo debe gestionar la imagen.
Si PlayStation 5 y Xbox Scarlett llegan en 2019, y son capaces de reproducir contenidos a 4k y 60fps de forma sencilla, es probable que la consola híbrida pueda perder terreno y muchos desarrolladores dejen de apostar por lanzar adaptaciones de sus juegos en la misma. Los rumores de la industria sostienen que Nintendo Switch Pro llegaría a principios de 2019. Esta contaría con 8 GB de RAM, 128 GB de almacenamiento interno y escalamiento dinámico, que permitirá a la consola generar una resolución 4K. Si bien esta no sería capaz de mover juegos en 4K real, si escalaría los mismos para ofrecer resoluciones para las pantallas que se están convirtiendo en un standard en todos los hogares.