Análisis
Personalmente llegué a emocionarme cuando, en mitad del E3, en la presentación de Sony, se anunció el remake o la remasterización de Grim Fandango, una de las últimas aventuras gráficas de la era LucasArts. Un título de los que había considerado siempre como uno de mis juegos favoritos de todos los tiempos.
Con el paso del tiempo, según se fueron viendo vídeos, hubo un par de asuntos que templaron mis ánimos: no veía una reconstrucción demasiado exhaustiva del original (seguían viéndose los polígonos que forman los personajes) y, por algún motivo, Schafer insistía en mantener el marco de la pantalla a 4:3. Personalmente, veía esta remasterización como una oportunidad de hacer un juego más plástico, más similar a lo que tuviesen en mente que tenía que ser en su momento, sin las limitaciones técnicas de 1998.
Ahora estoy delante del resultado final y no puedo más que dar las gracias. Es cierto que el juego continúa gozando de gran parte de los mayores problemas que ha presentado siempre el original. Es cierto que seguimos viendo como, sobre todo Glotis, está montado a base de polígonos y recordables…. También le vemos la trampa a muchos elementos. Pero los cambios realizados excusan, sobradamente el relanzamiento. Para empezar, el nuevo control del juego hace que nos olvidemos de lo complicado que resultaba a veces mover a Manny por los diversos escenarios del juego, que pueden ir del primer plano al general con un cambio de habitación. También observamos un sistema de iluminación más dinámico, que dibuja unas sombras realmente lujosas (comparadas con las manchas del original)… Pero no sólo eso.
El nuevo juego respeta casi escrupulosamente el juego lanzado en el año 98. Hace que todo lo que no nos gustó en su momento (básicamente el control y el bug que tuvo hasta en sus últimas reediciones para PC) desaparezca. Y el resto de cosas que hoy quedarían algo mal, como la iluminación o algunas texturas, las depura lo suficiente, pero sin darle más pomposidad.
Por lo tanto, y con la única excepción de su banda sonora, lo que tenemos ahora es una versión prácticamente calcada de lo que podíamos jugar en la versión original de PC, con algo de maquillaje. ¿Está justificado entonces su lanzamiento?
Si nos remitimos a la edición de PlayStation 4 y PSVita, evidentemente sí. Nunca antes se había podido probar este juego fuera de los márgenes del PC (y, bueno, de una versión pirata para Mac). Ahora lo podemos jugar en consolas, con su cross save y todo. También podemos jugar cómodamente, con posibilidades, incluso, de point’n click. Podemos escucharlo con el audio doblado original, con anotaciones de Schafer y su equipo, con una banda sonora que suena a placer absoluto…
Personalmente he considerado a Grim Fandango durante los últimos 15 años como un lugar de peregrinaje al que acudía cada poco tiempo. No era un juego que, en su comienzo, pudiese alardear de mostrar los gráficos más punteros, pero su diseño hacía que se sintiese diferente, que no se le pudiesen reprochar sus errores. Vale, me esperaba un cambio más radical, pero al final, bueno, toda remasterización sirve para que el peregrinaje no caduque al poco tiempo. Por todo ello, gracias a todos los implicado en este proyecto por permitirnos hacer este viaje de cuatro años una vez más. Volveremos a disfrutarlo como la primera vez.