CIERRE FORZADO
Rovio es una de esas empresas de videojuegos a las que se les conoce particularmente por un videojuego. Dicho juego en este caso es Angry Birds, uno de los títulos para dispositivos móviles que mejor resultado han logrado en los inicios de Google Play Store y App Store. Sin embargo, y pese a que Angry Birds ha contado ya en varios videojuegos distintos, el valor de la marca Rovio ya no es el mismo que el logrado en el año 2009 con el lanzamiento del juego.
Rovio comenzó a cotizar en la Bolsa de Valores a finales del pasado año y desde dicho inicio hasta ahora, sus acciones perdieron un 50% su valor. En su última reunión de accionistas, las expectativas de ingresos de la compañía disminuyeron con respecto a las que se estimaban al inicio del presente año fiscal, produciéndose el gran descenso en el valor de las acciones. Esto ha llevado a que la propia Rovio haya tenido que emprender una medida drástica para mantenerse a flote: cerrar su oficina de Londres.
El propio jefe de dicha oficina, Mark Sorrell, fue el encargado de dar a conocer la noticia a través de un tweet. Dicho mensaje dice lo siguiente:
"Me duele mucho deciros que Rovio London Studio se cerrará. Estos son momentos tristes para nosotros, pero miro hacia atrás con verdadero orgullo en el tiempo pasado con estas personas talentosas y amables. Ha sido todo un placer."
El cierre de la oficina de Londres supone el despido inmediato de las 7 personas que trabajaban en este estudio. Por su parte, la sede de la compañía se mantendrá abierta en Finlandia.