Las consolas retro mini que los jugadores piden a gritos (y que necesitamos en la estantería)
MEJORA EL RENDIMIENTO
Sony y Microsoft nos lo han puesto francamente fácil en esta generación a la hora de mejorar y optimizar nuestras consolas, PlayStation 4 y Xbox One respectivamente. En el caso de la máquina de la compañía japonesa podemos optimizar aún más su rendimiento con un simple truco: el cambio de disco duro.
Las máquinas actuales incluyen, por lo general, un disco duro HDD o también conocidos como 3,5 que oscila desde los 500GB pasando hasta los 2TB. Gracias a ellos podemos tener un amplio repertorio de videojuegos instalados, aplicaciones, películas, música y mucho más. Más allá de la capacidad es importante tener otros factores en cuenta. Y es que aunque tengan un gran espacio, debemos asegurarnos de la velocidad.
La velocidad es uno de los factores clave para poder contar con tiempos de carga mucho más rápidos, menos ralentizaciones en ciertos momentos y muchas más ventajas no sólo para los propios videojuegos en sí, sino también para la plataforma. Por supuesto, adquirir un disco duro SSD es algo más caro que los normales, aumentando el coste en base a la capacidad. Si ya habéis tomado la decisión de dar el salto a los SSD o ampliar la capacidad del 3.5, no olvidéis que en NeoxGames hemos hablado de los procesos a seguir para cambiar el disco duro a PS4.
La velocidad, factor clave para adquirir un SSD
Como ya hemos mencionado anteriormente, la velocidad se convierte sin lugar a dudas en el elemento principal para comprar un SSD. El precio, actualmente , puede oscilar desde los 50 euros hasta los 200 euros. Eso sí, en el caso de los modelos más baratos nos encontramos con apenas 120 GB de espacio, algo poco más que inútil si tenemos en cuenta que los títulos pueden ocupar hasta 100GB.
Dependerá de nosotros elegir con qué capacidad estaremos conformes y realizarnos ciertas preguntas. ¿Solemos jugar a varios juegos? ¿No basta con 256 y tener tan sólo para 3 juegos? ¿Cuánto estoy dispuesto a invertir?
Realizar la compra de un SSD es algo que hay que meditar, pero que a largo plazo sin lugar a dudas nos beneficiará cuando queramos disfrutar de la consola y sacar su máximo partido. Con ellos se reduce increíblemente el nivel de latencia, además de incrementar las velocidades de escritura y lectura, es decir, podrá realizar más operaciones por segundo.
Para que os hagáis una idea. Si en cualquier juego cargar una partida o la clásica pantalla de ‘Cargando’ puede llevaros entre 30 y 50 segundos con el disco duro base de la consola, con la instalación de un SSD se reduce ¡a tan sólo 15 segundos! No sólo eso. La capacidad y velocidad de escritura/lectura es importante, pero también también el que cierta carga de zonas se haga ipso facto, eliminando así cualquier tipo de ralentización que podría ser nefasta en según qué juegos.