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AUTÉNTICOS DESAFÍOS

Los cinco jefes finales más difíciles en los videojuegos

Estos enemigos serán recordados por siempre por su dificultad y alto nivel de desafío que suponen incluso para los jugadores más avezados.

Los jefes finales son sin lugar a duda el auténtico desafío de todo videojuego, un enemigo en el que poner en práctica los conocimientos adquiridos. Entre las reglas con las que debe contener todo jefe final encontramos un diseño atractivo pero por supuesto una dificultad a la altura. A lo largo de historia de los videojuegos se han dado miles de bosses, pero sólo cinco han conseguido colocarse en lo más alto de la lista. ¿Quieres saber cuáles son?

Comenzamos con todo un clásico NES, Mike Tyson’s Punch Out! es un gran ejemplo de jefe final desafiante. Vencer al bueno de Mike requerirá no sólo de unos reflejos perfectos, sino también de un timing digno de los mejores boxeadores. Y es que, ¿quién dice que un juego de hace más de 30 años no puede seguir siendo complicado?

Los jefes finales son uno de los elementos diferenciadores en los videojuegos

Gears of War fue una de las franquicias estrella en la pasada generación. Destacaba tanto en el increíble apartado visual como en lo depurado de su jugabilidad, pero también sacó de quicio a más de un jugador. El jefe final, el General Raam, se convirtió en una auténtica pesadilla por diferentes motivos. Desde el escenario, pasando por las hordas de enemigos que enviaba contra nosotros, por no hablar de que contaba con ataques que eran insta-kill.

El piromante en Dark Souls | From Software

Si alguien dudaba en que Dark Souls no iba a estar presente en la lista, que esté tranquilo. Ornsteins y Smough son sin lugar a dudas dos icónicos jefes finales de la saga que merecen estar entre los más complicados. Un combate con dos rivales al mismo tiempo, cada uno con sus propios ataques y cuya segunda parte es aún más complicada que la primera. Cuenta la leyenda que no han sido pocos los jugadores que abandonaron el juego aquí.

Volvemos a los juegos clásicos, esta vez de manos de Castlevania III. Esta aventura de NES encuentra en su jefe final, nada más y nada menos que Drácula, como el auténtico desafío para el usuario. Deberemos de estar pendientes de todos y cada uno de los movimientos del rival pues si morimos… nos tocará volver a comenzar el nivel desde cero.

Mega Man es uno de los títulos más recurrentes a la hora de hablar de videojuegos con alta dificultad, no iban a ser menos sus jefes finales. Este es el caso de Yellow Devil, un jefe que desafía la paciencia de cualquier jugador. No te fíes de sus sencillos y simples ataques, lo realmente complicado serán los saltos y pruebas que encontrarás durante el escenario. Sangre fría y paciencia serán más que necesarias para poder vencerlo.

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