Un cartucho de Nintendo World Championships va a salir a subasta y puede venderse ¡por más de 500.000 dólares!
Análisis
El mundo de los videojuegos cambia de una forma muy loca. Lo que hoy está de moda, mañana parecerá absurdo. Hoy te encantan los juegos con guitarras y mañana pensarás cómo perdiste tanto tiempo dándole a botones de colores haciendo como hacías algo que realmente no estabas haciendo.
Ahora, lo que está de moda, lo que todo el mundo quiere hacer, son juegos que fomenten el coleccionismo y la interacción con muñecos reales.
Después de que muchos pensasen que Skylanders era una tontería y que el tiempo demostrase que, por supuesto, no lo es, le llega el turno a la gran factoría Disney, que ha conseguido aunar un millón de conceptos en uno para que disfrutemos de un gran juego y, ya de paso, de todo su increíblemente enorme universo.
Porque, amigos míos, Disney es gigante y ya no exclusivo de princesas cantarinas y animales parlantes. Hoy es superhéroes, cine gótico infantil, series de televisión que ya nos habría gustado degustar cuando éramos pequeños (por supuesto me refiero únicamente a Phineas y Ferb) y un millón de cosas más que hacen apetitosa la mezcla.
Con todo ese material en el patio de atrás y el potencial de los videojuegos y de la mercadotecnia, Disney ha sabido crear una mezcla perfecta para que los niños y los no tan niños pasen por caja.
Para todos nosotros, amantes del coleccionismo, nace Disney Infinity (un poco tomando algunas ideas de Disney Universe), un juego que puede parecer tonto, pero que no lo es. Es una idea genial que, esperemos, no llegue en el mal momento dela crisis y pases al olvido, porque nos gustaría mucho verla más grande y fuerte.
Para empezar, ¿qué nos encontramos? Muy sencillo, el pack básico nos ofrece tres mundos y tres personajes: Mr. Increíble, Jack Sparrow y Sully. Los mundos, por supuesto, son el de Los Increíbles, Piratas del Caribe y Monstruos University. Si pones un mundo y un personaje en la base incluida en el starter pack, podrás usar dichos personajes y entrar en sus mundos.
¿Limitaciones? En principio, sólo puedes entrar en los mundos de cada personaje con los muñecos que pertenezcan a sus películas o series para jugar las campañas de cada escenario. No podrás hacer una misión de Los Increíbles con Jack Sparrow, por ejemplo. Aunque, para los que quieran mezclar, tienes un mundo de posibilidades llamada Toy Box, donde tú pones las reglas y donde puedes construir a placer.
Las posibilidades de este juego se muestran tan ilimitadas como tiempo disponga el jugador y dinero en su cuenta corriente el que le toque pagar. Ya hay personajes de más películas, entre ellas El Llanero Solitario (que después del éxito de la película seguro que se convierten en una pieza de coleccionista si este juego sigue funcionando mucho tiempo), Cars y, próximamente, Pesadilla Antes de Navidad, Rompe Ralph... Venden piezas de habilidades, que se ponen debajo de los personajes… En definitiva, el mundo que plantea Disney Infinity es gigantesco, es rico, es apabullante. Y, para colmo, cuenta con unos juguetes diseñados con gran acierto y creando un estilo propio que diferencia notablemente estos productos de cualquier otro de la marca. Todo en conjunto hacer que sea muy complicado no amar este juego. De caso contrario, no se tiene infancia suficiente.