JUEGO EN LA NUBE
Los detalles sobre las consolas de nueva generación no paran de crecer. Si hace algunas horas os hablábamos de todos los detalles que conocemos sobre PlayStation 5, hoy le toca el turno a Xbox Scarlett, nombre en clave de la próxima consola de Microsoft. Consola o, mejor dicho, consolas, ya que uno de los mayores insider de la industria relacionados con la marca Xbox, Brad Sams, ha asegurado recientemente que Xbox Scarlett en realidad cuenta con dos modelos muy diferentes.
Por supuesto, Microsoft aún no ha confirmado estos detalles filtrados, pero la veracidad de Sams es bastante elevada. En primer lugar, el hardware y la infraestructura de Scarlett estaría siendo diseñado por el mismo equipo encargado de Xbox One X, y tendría una fecha de lanzamiento prevista para 2020. Es decir, que en el próximo E3 podríamos ver los primeros detalles... Tiene lógica, ya que todas las apuestas aseguran que será Microsoft, al ir por detrás en ventas esta generación, la que mueva primero su ficha del ajedrez.
Microsoft estaría desarrollando dos modelos separados de Xbox Scarlett. Uno de ellos sería un modelo tradicional, como ya adelantó Phil Spencer en la pasada conferencia del E3. Una consola muy potente con un precio de lanzamiento estándar en una nueva generación, quizás 400 o 500 euros. La otra versión será una consola significativamente más barata, y también con menos prestaciones técnicas, pero centrada completamente en la nube. Es decir, sería una consola en la que los juegos se reproducen en un servidor, y la máquina sólo debe gestionar la imagen. Esto permite jugarla en cualquier parte y convierte Xbox en un servicio de juegos, igual que Netflix en el mundo del cine.
En cuanto a las especificaciones de los dos modelos, Brad Sams asegura que de momento las máquinas están en fase de construcción y pueden variar mucho. Microsoft está trabajando en una tecnología de juego en la nube llamada Scarlett Cloud, que será un pilar en ambas consolas. Además, el equipo de desarrollo trabaja en un software exclusivo que desarrolla algunas tareas en la consola y, supuestamente, evita todos los problemas del input lag. Algunas tareas como partículas, físicas y gestión del control se haría en la plataforma, reduciendo así la carga de datos streaming.
Es importante que ambas máquinas sólo se diferencian por el precio/potencia y por su sistema de juego. Pero ambas consolas recibirán los mismos juegos y con la misma calidad, no habrá diferencia entre los usuarios de ambas consolas. Por así decirlo, Xbox se aseguraría que no habría usuarios de primera y de segunda. Es más, no habría problemas de compatibilidad entre los juegos de una y otra consola.
El mercado se estaría encaminando hacia un sistema de juego streaming en la nube, y este sería un paso intermedio, una buena forma de hacer esta transición.