NO TE ATREVAS A HACERLO
Los drones se han convertido en una de las aficiones más atractivas para muchos en todo el mundo, pero también en un peligro.
Los drones son ya un hobbie más. Atrás quedaron los tiempos en los que los drones eran un entretenimiento al alcance de muy pocos. En la actualidad se puede adquirir uno de estos dispositivos por un precio más que asequible, partiendo desde los 100 euros y llegando hasta varios miles de euros, dependiendo del modelo y sus características. Japón no ha estado exenta de la fiebre por los drones, aunquerecientemente ha dejado una noticia que ha ocupado las planas de varios periódicos.
Drones y alcohol no es una combinación que se nos antoje muy apetecible, especialmente si tenemos en cuenta que estos dispositivos pueden ocasionar algún que otro peligro para las personas en las manos equivocadas. Un hombre que había ingerido la friolera de hasta 8 latas de cerveza decidió utilizar un dron que había comprado años atrás.
En el estado en el que se encontraba debido al alcohol, dificultando por lo tanto el control del dron, el hombre estrelló el dispositivo en una de las casas, chocando contra una ventana de una residencia cercana. El vecino y que presenció los hechos, llamó directamente a la policía. El culpable reconoció los hechos, terminando arrestado por las autoridades de la ciudad.
Debido al aumento del uso de drones y conociendo el peligro que pueden entrañar para los habitantes, a principios de año Japón instauró una ley por la cual pilotar uno de estos aparatos bajo los efectos del alcohol quedaba terminantemente prohibido. En el caso que nos ocupa, el dron chocó contra una ventana y no contra un habitante directamente, lo cuál pudo haber terminado en un grave accidente.