TODO OCURRIÓ EN UNA NOCHE
La historia ocurrida en este colegio nada a medio camino entre el terror y el thrilller, arrojando todo tipo de dudas.
Las escuelas son lugares que durante la mañana son un verdadero remanso de alegría gracias a los niños y niñas que juegan en el recreo o corretean por los pasillos. Para muchos, la historia cambia cuando llega la noche, convirtiéndose en lugares que inspiran temor. El cine es en parte culpable de este tipo de sensaciones, aunque como se suele decir también hay excepciones.
El pasado 15 de junio hacia las 21:30 de la noche, en Japón y más concretamente en Wakayama, un oficinista de 55 años entró a robar un uniforme escolar guardado en una de las habitaciones. Puede parecer un hecho sin importancia, pero a partir de este punto la historia no hace más que cobrar tintes extraños.
Ueda, nuestro protagonista, consiguió el uniforme pero también se lo probó. El ladrón pasó toda la noche en la escuela, paseando por sus aulas y pasillos. Hacia las 3 de la madrugada ya del 16 de junio, Ueda se dirigió a los baños, encontrándose con una sorpresa inesperada: había otro hombre. Éste, de unos 30 años, logró detener y arrestar a Ueda.
Como ya estaréis imaginando surgen todo tipo de preguntas llegados a este punto: ¿Qué hacía un hombre a las 3 de la madrugada en el baño? En las noticias niponas no se ha desvelado más información al respecto, por lo que tendremos que aplicar la lógica. Posiblemente se trate de un guarda de seguridad del colegio o incluso encargado de mantenimiento. A través de las redes sociales se habla que el hombre del baño podría pertenecer a una unidad para detener a los implicados en los recientes y cada vez más comunes robos de escuelas.