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MUNDIALMENTE FAMOSA
Las mascarillas son desde hace unos meses con el inicio de la crisis sanitaria en uno de los bienes más demandados por todas las personas. No obstante hay quienes parecen tener mascarillas de sobra o darles el uso equivocado. Este ha sido de los habitantes de Tokio donde las autoridades locales del barrio de Shibuya han tenido que solicitar que dejen de poner mascarillas a la icónica estatua de Hachiko.
La historia de Hachiko es de sobra conocida fuera de Japón, dando lugar a varias películas. Un perro que esperó a su dueño durante años en la estación de Shibuya. A raíz de la proeza, los nipones decidieron erigir una estatua que conmemorara su honor y lealtad al dueño. Desde entonces son millones los turistas que anualmente deciden realizar la fotografía de turno junto a Hachiko, aunque en las últimas semanas el motivo de la visita ha sido diferente.
Son muchas las fotos que han circulado por internet sobre la estatua portando una mascarilla. A pesar de que la propia policía japonesa se ha encargado de retirarla, éstas siguen apareciendo día a día. No se trata de una mofa o broma pesada, sin ir más lejos es un recordatorio de la importancia de usar una mascarilla para ayudar a prevenir la propagación del COVID-19.
A pesar del mensaje que quieren transmitir al poner la mascarilla a la estatua, las autoridades y responsables del cuidado de la plaza han solicitado por enésima vez no poner más la mascarilla al perro. La escasez de este complemento no sólo se aplica a nuestro país, sino también a Japón. Motivos más que de sobra para que se utilicen de manera correcta.