Así es la playa de colores creada con residuos; preferirás sacar fotos en vez de tomar el sol

En ocasiones, en los lugares más turísticos, nos encontramos con lugares espectaculares que nunca hubiéramos imaginado. Uno de estos lugares está creado por la mala acción del hombre, los desechos y residuos que genera nuestra sociedad, y se encuentra en uno de los países más turísticos del planeta. Hablamos de la famosa playa de Nagasaki creada con piedras de múltiples colores.

Dicen que las mejores playas se encuentra en lugares tan particulares como el Caribe (región conformada por el mar Caribe, sus islas y las costas que rodean a este mar), Zanzíbar (una región semiautónoma de Tanzania), las islas de Similan (en Tailandia del Sur) o Bora Bora, una de las islas de la Polinesia Francesa. Realmente no sabemos cuál es la mejor playa del mundo, pero esta es sin duda única. Pese a su peculiaridad, ésta no podemos considerarla de las mejores playas del mundo ya que en realidad no son piedras de colores, está formada por desechos de vidrio.

La prefectura de Nagasaki, situada al sudoeste de Japón, es un destino turístico que tiene mucho que ofrecer. Si visitas el país no sólo por los videojuegos, el anime y las grandes ciudades, sino también por sus países e historia, es un lugar de visita obligada. En Nagasaki se encuentra el Castillo Shimabara o el Castillo Hirado, podemos pasear por el Santuario Suwa o disfrutar el parque temático que recrea los Países Bajos, Huis Ten Bosch. Además, en cuanto a la gastronomía, es aquí en donde se puedes probar un tipo especial de rollos de sushi de atún llamado tekkamaki.

Pero en la ciudad de Omura se encuentra un enclave muy peculiar y que no sale en los libros o mapas turísticos. Es una playa sin nombre situada en la ciudad en la que no encontrará la arena blanca de un paraíso tropical, ni la arena volcánica negra que se puede encontrar en las playas cercanas a Tokio. Lo que distingue esta playa de las demás es que su arena reluce como un arcoíris. El motivo es que no está hecha de arena, sino de vidrio.

La playa es parte del parque Morizono, que tiene una hermosa vista de la bahía de Omura. Hay un muro entre el parque y la playa, pero puedes acceder a la playa bajando un pequeño tramo de escaleras. Desde lejos parece una playa normal pero, una vez que te acercas, es una imagen totalmente diferente. Los guijarros deslumbrantes y coloridos están hechos de vidrio reciclado y sus bordes son redondeados por la erosión, por lo que es seguro tocarlos e incluso caminar sobre ellos.

El único inconveniente de esta playa es que no se permite el baño. Esto no tiene nada que ver con los cristales, sino por el agua que rodea la ciudad de Omura. El gobierno local trabaja para limpiar el agua de la bahía y esta playa se encuentra en ella. Por seguridad es mejor no mojarse.